Como empezo todo


En verano de 2011 el fotógrafo y director de este proyecto, Diego Ballesteros, interesado por la situación del pueblo palestino visita la ciudad de Nablús en Cisjordania con la intención de realizar un reportaje fotográfico para su archivo personal.
Allí se reune con Wajdi Jaeesh, director de la ONG  Human Supporters Asociation, que le muestra la realidad de un pueblo sometido a un bloqueo militar impuesto por el gobierno de Israel que condiciona la vida de la población e impide el libre tránsito de sus habitantes dentro de su propio territorio.




Wajdi Yaeesh

Wajdi Yaeesh director de la ONG Human Supporters Asociation brinda a nuestro fotógrafo toda la colaboración posible para realizar su trabajo y la oportunidad de conocer de primera mano la realidad de su pueblo. 
La magnífica labor que Wajdi realiza con su asociación es un ejemplo humano de entrega y convicción que sirve de inspiración para.la puesta en marcha de este proyecto.

Human supporters asociation ofrece a los jóvenes de la ciudad de Nablus y sus alrededores una alternativa no violenta para hacer frente a la situación política, siendo punto de encuentro para los activistas que promueven el cambio social pacífico en la sociedad palestina.

Su misión es potenciar, movilizar y servir a la comunidad local con especial atención a los niños y adolescentes, enseñando a los jóvenes a ser útiles en su propia sociedad de una manera positiva y allanando el camino a futuros líderes de la comunidad con un enfoque autocrítico y no violento.

HSA no distingue entre razas, ideologías ni religiones y proporciona a los jóvenes de Nablús educación gratuita, acercamiento a la cultura y el deporte y apoyo psicológico.



Situación actual de Palestina.
 
 
El gobierno israelí mediante un despliegue militar construye una valla que rodea los estados palestinos y los aisla del mundo. El muro no solo marca una linea divisoria entre los dos estados sino que penetra en territorio palestino dividiendo pueblos enteros y separando familias y poblaciones vecinas. Las áreas robadas son utilizadas para la construcción de nuevos asentamientos de colonos ocupando ilegalmente sus tierras bajo el abrazo protector un muro que secuestra la libertad e impide el desarrollo del pueblo palestino como nación libre e independiente. En estos territorios decenas de miles de olivos y otros árboles y extensas áreas agrícolas han sido confiscadas y destruidas y cientos de viviendas demolidas.


El muro que mide 700Km es parte de un sistema de unos 550 controles y bloqueos que han levantado las autoridades israelíes para controlar a la población de 2 millones de palestinos dentro de este territorio.
En Julio de 2004 la Corte Internacional de Justicia determino que el levantamiento de la valla constituye una violación del derecho internacional y contribuye a la comisión de graves violaciones de derechos humanos concluyendo que Israel debía detener la construcción del muro dentro de los Territorios Ocupados, desmantelar las secciones ya construidas allí y reparar el daño causado. El gobierno israelí rechazó las recomendaciones.


 En el mapa, en el lado izquierdo, la línea verde marca la frontera reconocida internacionalmente entre Israel y Cisjordania (en los Territorios Ocupados) y la frontera entre Jordania y Cisjordania en el lado derecho. La línea roja marca el emplazamiento de la valla.

La construcción del denominado muro de la vergüenza supone lo siguiente:
- 60.500 palestinos residentes en 42 pueblos de Cisjordania vivirán entre el muro y la línea verde con Israel.
- 12 de estos pueblos y alrededor de 31.400 palestinos quedarán completamente cercados por el muro.
- Más del 10% de la tierra palestina de Cisjordania, unas 57.518 hectáreas, quedará al otro lado del muro.
- Más de medio millón de palestinos vivirán dentro de una franja de un kilómetro desde la valla/muro.
- Unos 200.000 palestinos se verán afectados por la parte del muro construido en Jerusalén Oriental.




Las consecuencias





 
Ante esta situación desesperada, muchos jóvenes palestinos se unen a las facciones más radicales del islam para ofrecer una resistencia violenta provocando un círculo vicioso odios, venganzas y muertes.En esta espiral de violencia, terroristas palestinos matan a civiles judíos y militares israelíes matan a ciudadanos palestinos dejando a su paso mujeres viudas, niños huerfanos, madres que pierden a sus hijos y familias de uno y otro bando destrozadas




En las calles, mártires son ensalzados como héroes, son imitados por los niños en sus juegos y sirven de ejemplo a jóvenes que no dudan en unirse a la causa ante un futuro incierto. Lamentablemente acaban muertos o matando.


Las víctimas
Atrapadas en medio de este caos viven día a día ciudadanos comunes, gente de a pie, personas como nosotros que se levantan cada mañana para ir a trabajar con la esperanza de vivir en paz y darles la mejor vida posible a sus familias.
Un pueblo de una cultura asombrosa y una hospitalidad envidiable de cuyos valores humanos y familiares occidente tiene mucho que aprender. Un pueblo en el que viven sobre todo personas buenas con buenas intenciones, personas como Wajdi, que son un ejemplo a imitar por su comunidad enseñando a sus semejantes que el camino de la paz y la convivencia no solo es posible sino que es el único camino posible para poner fin a la violencia y al conflicto.




























Los hombres construimos demasiados muros y no suficientes puentes.